Desgraciadamente los trabajadores de Canadá no tienen días compensatorios por mudanza. Las empresas legalmente no pueden ofrecer esos días para ayudarles a mover todo el contenido de su casa, por lo que a lo largo de Canadá se ha instaurado la tradición de aprovechar las festividades de verano, entre las que destaca el Día de Canadá. Muchos canadienses aprovechan ese finde largo y el buen tiempo para cambiar de vivienda ya sea de alquiler o de compra. Por lo que es normal ver muchos carteles de "se venden" o "se alquilan" en estas épocas.
Esta tradición comenzó en la provincia del Quebec en el Siglo XVIII. Por ley todos los arrendadores debían actualizar su contrato el 1 de mayo por lo que muchos inquilinos aprovechaban para cambiarse de domicilio. Esta fecha cambió rápidamente verano para no interrumpir el año escolar de los estudiantes y aprovechar el buen tiempo. Aunque a día de hoy no haya ninguna ley que obligue a tener una fecha específica para renovar, es desde entonces esta fecha la señalada por muchos canadienses para mudarse.
Esta tradición se ha ido expandiendo por todo Canadá convirtiendo este día en un pequeño caos y dolor de cabeza para muchas personas y un gran beneficio para las empresas de transporte.
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